10 películas de poker imprescindibles

Las notícias de Cara de Poker ya no se están actualizando. Todas las notícias de Cara de poker puedes encontrarlas ahora en el blog de PokerStars o accediendo a la .

El poker y el cine tienen una estrecha relación; forman una pareja que siempre ha demostrado mutuo entendimiento. Tal vez sea porque, en definitiva, cine y poker son juegos inventados para hacernos soñar. Sea como sea, hay diez películas imprescindibles que definen la visión cinematográfica del poker. Seteve McQueen, George Clooney, Edward Norton, Paul Newman o, como no, Frank Sinatra, son algunas de las figuras que han elevado el poker a su categoría mítica y que, quizás inconscientemente, nos empujaron a jugar nuestra primera partida. Porque, aunque no conociéramos muy bien las reglas, sabíamos que el poker es un juego divertido y con estilo. He aquí 10 de las películas que han marcado para siempre la imagen del Poker:

No le darás al vicio más de la cuenta
El Hombre del brazo de oro (The Man With the Golden Arm) de Otto Preminger (1955)

En esta dramática película el protagonista sale de la cárcel y regresa a su Chicago natal para dejar atrás su adicción a la heroína y al juego. Tenía que ser Frank Sinatra, el icono de la década dorada de Las Vegas, quien encarnara de manera tan convincente a este hombre con un talento extraordinario para el poker que sueña con ser músico. Su mujer, aparentemente inválida, y su antiguo jefe le chantajean para que utilice su don y, contra su voluntad, siga siendo “El hombre del brazo de Oro” en el mundo de los naipes.
No te meterás con los mayores de la clase
El rey del juego (Cincinnatti Kid) de Norman Jewison (1965)

Posiblemente, la película más mítica sobre el mundo del poker, en la que los ases del juego compiten por el título del mejor jugador en un torneo celebrado en New Orleans. Excepcional clásico con sabor añejo en el que Steve McQueen, aka Cincinnatti Kid, se propone derrotar al rey del poker, interpretado por Edward G. Robbinson. El cara a cara en la mano final es uno de los momentos estelares que la ficción le ha dedicado al poker.
No le tocarás un pelo a mi mejor amigo
El golpe (The Sting) de George Roy Hill (1973)

Paul Newman y Robert Redford son dos estafadores que se alían para dar El gran Golpe y jugársela al mayor gánster de la ciudad, quien asesinó a un amigo del personaje interpretado por Redford. En esta película el guión es impredecible, los actores realizan interpretaciones brillantes y la ambientación es de primer nivel. Una partida de poker es el punto de partida para poner en marcha el arriesgado plan. Aquí, el poker es presentado como motor de venganza e ingenio en la que es, sin duda, una de las visiones más afortunadas que el cine le ha dedicado al mundo pokerístico.
No te enamorarás de una revolucionaria, que te la liará
Havana de Robert Redford (1990)

En esta película el Poker es utilizado por Redford, director y actor, como metáfora del riesgo, como terreno simbólico en el que una persona debe arriesgar. Él, un experimentado jugador, viaja a La Habana para jugar una importante partida a ritmo de salsa y mojitos. Sin embargo, en el barco conocerá a una atractiva mujer que le hará elegir entre su cómoda vida de jugador y el impulso de la revolución de los años cincuenta.
No llevarás pistolas si sabes que puedes perder una mano
Maverick de Richard Donner (1994)

Un film en clave de gag con un reparto de actores pasándoselo en grande. Mel Gibson, Jodie Foster y James Gardner interpretan a los personajes de esta película basada en una serie de televisión de los años 50 sobre un pistolero del far west. El seductor Brett Maverck tiene que conseguir $25000 para inscribirse en el torneo de poker (winner takes all) que se celebra en un elegante barco a vapor. Triquiñuelas y ases ocultos, las tácticas pokerísticas y estrategias de los personajes dejan bastante que desear, pero la película vale la pena por su toque desparramado y porque relaciona el poker con el western, dejando claro que no se sabe qué es anterior, si el huevo o la gallina.
No irás de niño bonito si lo que te gusta es la acción
Rounders de John Dahl (1998)

El argumento sigue patrones muy clásicos. Un joven estudiante de derecho ve su vida trastocada cuando su mejor amigo sale de la cárcel. Su estabilidad sufre un vuelco, ya que este amigo le sumergirá, de nuevo, en el mundo del juego. Y es que el protagonista tiene un don innato para el poker. Matt Damon interpreta al talentoso jugador, mientras que Edward Norton asume el papel del amigo canalla. Lo más destacable es el retrato que se hace del póker como alternativa a la rutina. El personaje interpretado por Damon llega a decir, “ayer por la noche me senté en aquella mesa, ¡y me sentí vivo! dejando claro que las pasiones hay que vivirlas.
No lo harás, por muy buenas cartas que lleves, no te apostarás los dedos de la mano
Lock and Stock de Guy Ritchie (1998)

Una cuenta atrás en forma de dedos amputados; eso es “Lock&Stock”. Unos jóvenes reúnen una suma de dinero para apostarla contra el mafioso local. El capo hace trampas y, por consiguiente, los chavales le deben dinero. Por cada día que pase, el gangster les cortará un dedo de la mano. El poker visto desde el punto de vista más brit, urbano y sucio, sin nada del glamour ni del misticismo yankee. Todo un viaje frenético para saldar una deuda en el que la sangre, el humor y la violencia se enredan con perfecta armonía.
No me dejarás jugar solo en esta ciudad
Ocean’s 11 de Steven Shoderberg (2001)

Un homenaje al Rat Pack formado por Sinatra, Dean Martin, Sammy Davis Jr. y cia. Un deleite para los amantes del cine de atracos perfectos y toda una joya para quienes aprecien ver juntas a estrellas de la talla de George Clooney, Brad Pitt, Julia Roberts o Matt Damon. El film es un tributo al espíritu mítico de Las Vegas, donde el juego, el farol y hasta el robo siguen una ética. El poker es el marco para presentar al personaje de Pitt, quien, antes del gran golpe, se gana la vida enseñando a jugar a pseudo-estrellas juveniles de la televisión.
No podrás ocultar tu farol a Mr. Bond
Casino Royale de Martin Campbell (2006)

Sin duda, la mejor película de James Bond. En su valiente planteamiento rompe con ideas previas y presenta una acción intensa y descarnada. El Bond del siglo XXI corre, suda, sangra y se despeina sin perder un ápice de encanto. En un film de estas características, uno esperaría que el eje central de la trama fuese una persecución, un tiroteo o una pelea mortal. Sin embargo, el bloque central de “Casino Royale” lo ocupa una seductora partida de Texas Hold’em en el casino de Montenegro. La tensión de las jugadas se funde con las miradas y los diálogos del Bond interpretado por Daniel Craig y las pausas en la partida son aprovechadas para ofrecer carnaza a la acción. El destino de la paz mundial se juega a una partida de poker, Bond da un trago a su Martini, ladea la cabeza y, sin apenas pestañear, suelta un “all-in”.
No te harás un lio la víspera de las World Series
Lucky you de Curtis Hanson (2007)

El amor y el juego, la chica y el poker, mi vida personal o mi profesión. En eso se divide el personaje interpretado por Eric Bana, un jugador profesional de poker, cuando conoce a la chica a quien da vida Drew Barrymore. Mientras en la mesa arriesga y juega de forma agresiva, en su vida pasa de largo sin tomar demasiado partido. Como en la mayoría de los casos (en la vida, en el poker y hasta en la pesca submarina a pulmón) será la chica quien le enseñe que siempre hay que arriesgar, confiar en uno mismo y saber retirarse a tiempo.